Ya sea porque la encontramos en fenómenos naturales como los rayos y la electricidad estática, o porque la utilizamos para la iluminación de nuestros hogares y para hacer funcionar todo tipo de aparatos electrodomésticos y máquinas eléctricas, incluyendo el dispositivo en el que estás leyendo este artículo, lo cierto es que a diario interactuamos con la electricidad.

Gracias a que la humanidad aprendió a utilizar la electricidad a conveniencia, el mundo ha podido desarrollarse vertiginosamente en los últimos 100 años. En la actualidad, la electricidad forma parte indisoluble de nuestras vidas, e interactuamos con ella sin darnos cuenta siquiera. Si nos falta, aunque sea por unos minutos, recordamos rápidamente que nuestra vida gira en torno a ella, y precisamente por estar tan acostumbrados a utilizarla, es fácil olvidar los peligros asociados con su uso.

En Cuba es frecuente que, ya sea por motivos económicos o por irresponsabilidad, muchas personas decidan realizar trabajos eléctricos sin estar debidamente capacitados para ello. A pesar de que Watt Electric recomienda firmemente la contratación de electricistas debidamente formados, si vas a ejecutar un trabajo eléctrico en tu casa y no tienes la formación necesaria, te pedimos que al menos leas y apliques las recomendaciones de seguridad contenidas en este artículo para evitar accidentes fatales.

Es importante tener en cuenta que en Cuba los accidentes domésticos más frecuentes son las quemaduras, las intoxicaciones, los envenenamientos, la introducción de objetos extraños en la boca, la nariz y los oídos; la asfixia por lesiones, las caídas y heridas y, por supuesto, las lesiones producidas por la electricidad. Al mismo tiempo, los sectores con mayor número de accidentes fatales son la agricultura, las industrias azucarera y básica, y, por supuesto, la construcción. Esto quiere decir que te estás enfrentando a múltiples riesgos, y no debes olvidarlo en ningún momento.

¿Cuáles son los peligros y riesgos más comunes al trabajar con electricidad?

La seguridad eléctrica debe ser tratada siempre como una prioridad, ya que la electricidad es una fuerza poderosa que puede dañar gravemente, y subestimar sus riesgos trae como resultado un número elevado de muertes anuales por electrocución en el mundo entero.

Debes entender que el cuerpo humano presenta poca resistencia a las corrientes eléctricas debido a su alto contenido de agua y electrolitos, y los efectos de la misma dependen de varios parámetros como: la zona del cuerpo y las condiciones en la que se produce el contacto, la superficie de contacto y las condiciones fisiológicas del individuo en dicho momento.

Los riesgos más comunes asociados a los trabajos que se realizan con electricidad son:

  • El choque eléctrico, ya sea por contacto directo o indirecto en la ejecución de instalaciones eléctricas o en el uso de herramientas eléctricas, tales como los taladros. El contacto con partes vivas expuestas, como cables o alambres que no estén debidamente aislados u otros equipos eléctricos, pueden causar descargas eléctricas y quemaduras. Así mismo, tocar un artefacto cargado con electricidad con las manos mojadas, o mientras se está parado sobre agua, aumenta exponencialmente el nivel de riesgo. Los choques eléctricos pueden causar dolores intensos, daño a los nervios, músculos o tejidos, sangrado interno, pérdida de la coordinación y control muscular, y fibrilación ventricular o paros cardiacos.
  • Las quemaduras, ya sean por choque o arco eléctrico, o por tocar superficies que se encuentren a temperaturas elevadas. Son comunes los accidentes por tocar elementos calientes en labores de doblado de tuberías con calor o soldando terminales. De igual manera, el flujo de la corriente eléctrica corriendo a través del cuerpo humano puede causar quemaduras graves internas y externas.
  • Las caídas o golpes, muchas veces producidos como consecuencia de un choque o arco eléctrico. Aunque la electrocución puede causar lesiones directamente, también puede causar lesiones indirectas, como caídas de escaleras, techos, balcones, muebles, y andamios, con sus respectivas lesiones asociadas.
  • Los circuitos o equipos sobrecargados pueden causar incendios o explosiones, especialmente si ocurren en áreas donde se almacenan substancias explosivas o inflamables.

Otros riesgos asociados indirectamente con la ejecución de trabajos eléctricos son:

  • Contacto con polvo, partículas, u objetos en los ojos.
  • Contacto con elementos cortantes y punzantes en cualquier parte del cuerpo.
  • Golpes por diversos elementos que puedan existir en las superficies de trabajo o en la manipulación de materiales o herramientas.

Es importante tener en cuenta que una persona no necesita trabajar directamente con electricidad para estar en contacto con el riesgo eléctrico. Aquellos observando o ayudando también pueden correr riesgos.

¿Qué medidas debes tener en cuenta antes de comenzar la ejecución de un trabajo eléctrico?

Si tienes aparatos de medición, como un detector de voltaje o un multímetro, es recomendable revisar que funcionen correctamente antes de empezar a trabajar, y asegúrate de «enfriar» la línea, es decir, asegúrate de desconectar completamente de la electricidad los cables, lámparas, o equipos que vas a instalar, desinstalar, reemplazar, o a los que vas a dar mantenimiento. Los electricistas, por seguridad, no trabajan con electricidad siempre que sea posible, así que tampoco debes hacerlo tú.

Detector de voltaje inalámbrico
Detector de Voltaje Inalámbrico; recuerda probarlo siempre con un circuito "vivo" para asegurarte de que funciona correctamente.

Siempre debes comprobar que los cables que vas a maniobrar no tengan tensión antes de tocarlos. Si no tienes un aparato de medición para comprobarlo, lo más seguro es desenergizar el circuito y, si no estás seguro de cómo hacerlo, debes cortar la electricidad general de la casa o local.

No trabajes en lugares húmedos o cerca de líquidos que sean inflamables o trasmitan la electricidad, ni realices trabajos a la intemperie en situaciones climatológicas adversas, ya sea lluvias, vientos fuertes, tormentas, inundaciones, o cualquier otra similar. Tampoco debes trabajar si las herramientas o la ropa que tienes puesta están mojadas.

Ten una toalla o un trapo a mano para secarte el sudor; mantén tu ambiente de trabajo limpio y ordenado, libre de peligros y obstáculos; asegúrate de colocar las herramientas y equipos que vas a utilizar de manera que te sean fácilmente accesibles sin necesidad de moverte demasiado, ni realizar maniobras peligrosas, especialmente si estás subido a una escalera, andamio, o similar; y nunca uses cables de extensión que presenten daños en su aislamiento o conexión.

Los cables de extensión nunca deben ser la solución permanente para energizar un aparato eléctrico de ningún tipo, y siempre deben colocarse de manera segura, evitando que se pueda tropezar con ellos. Ten en cuenta que no todos los cables están diseñados para su uso en exteriores, especialmente en lugares donde sufran de las inclemencias del tiempo.

Los tomacorrientes son un elemento clave a tener en cuenta, ya que pueden convertirse fácilmente en un riesgo. Se deben evitar insertar múltiples enchufes en un mismo tomacorriente siempre que sea posible, y estos deben estar completamente insertados en el zócalo en todo momento. Si detectas un enchufe o tomacorriente dañado, debes evitar utilizarlo.

Tomacorriente con múltiples extensiones
Se deben evitar insertar múltiples enchufes en un mismo tomacorriente siempre que sea posible.

¿Qué hay de la ropa, los medios de protección y las herramientas?

Los electricistas deben trabajar siempre utilizando medios de protección según el tipo de trabajo que realizarán, ya sean cascos, gafas, ropa de seguridad y zapatos aislantes, arneses o cinturones de seguridad, guantes, y protecciones faciales para el polvo, los productos químicos, o de cualquier otro tipo.

Si no tuvieras acceso a estos medios de protección, al menos debes asegurarte de no llevar objetos de metal mientras estés realizando trabajos eléctricos. Las cadenas, relojes, anillos, hebillas de cinturón y similares pueden ocasionar un cortocircuito o atraer un arco eléctrico. El metal es un excelente conductor de la electricidad, por lo que en caso de contacto se puede producir una descarga muy peligrosa.

Asegúrate de vestir ropa cómoda y práctica para trabajar, preferiblemente de algodón o de un tejido incombustible, y que te quede debidamente ajustada, para evitar que la ropa restrinja tus movimientos o se enrede en algún objeto y tengas un accidente. Ponte zapatos con suelas de goma; abotona los puños de la camisa si fuera el caso, y no uses accesorios que puedan enredarse, como collares o pulsos.

Haz un uso responsable de las herramientas, evitando utilizarlas con fines para los que no están diseñadas. Mantén el área de trabajo libre de basura y otros escombros que puedan limitar el libre movimiento o provocar accidentes, limpia puntualmente los líquidos que se hayan derramado y mantén los pisos completamente secos.

Cuida tu vida.

Los electricistas trabajan en entornos de alto riesgo y utilizan equipos eléctricos como parte de su trabajo, pero, para ello, reciben una amplia capacitación que les permite trabajar de manera segura y reconocer los riesgos potenciales a los que pueden enfrentarse. Si no has recibido una capacitación adecuada, al menos asegúrate de cumplir con estos requisitos mínimos de seguridad al ejecutar un trabajo eléctrico. Cuídate, y cuida a los que te rodean.

Watt Electric instalando un generador auxiliar
Siempre debes usar los medios y herramientas necesarios para cada labor cuando trabajes con instalaciones eléctricas.

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